Joe Richardson
Conducir un coche de carreras Ferrari en el circuito internacional de Daytona es la máxima aspiración para cualquier alumno de la escuela de conducción Corso Pilota. Aquí, al volante del 488 Challenge Evo, el actor Daniel Wu se siente como en casa
Las tribunas del circuito Daytona International Speedway de Florida, EE. UU., son uno de los anfiteatros más espectaculares del mundo. Más de 100.000 asientos se extienden sobre el exigente trazado del famoso circuito para formar una estructura tan larga (1,5 km de longitud) que tuvo que diseñarse de forma que compensase la curvatura de la Tierra.
Venir como aficionado a este evocador circuito es realmente especial, ser uno de los intrépidos profesionales que compiten por la victoria en la pista lo es aún más. Pero no hace falta ser piloto oficial de Ferrari en la mundialmente famosa Rolex 24 de Daytona para disfrutar de este circuito mítico en un coche de carreras del Cavallino Rampante…
Fundada en 1993, la escuela de conducción Ferrari Corso Pilota ofrece diferentes niveles de pilotaje que combinan con maestría experiencia y ambición. Los participantes empiezan por el nivel Corso Pilota Sport, luego pasan al Corso Pilota Avanzato y el Corso Pilota Evoluzione, y de ahí al nivel avanzado, el Corso Pilota Challenge, donde les espera un Ferrari 488 Challenge Evo.
El nivel Challenge se imparte en circuitos emblemáticos de todo el mundo. Las sesiones de teoría e información técnica examinan la configuración y los mandos del 488 Challenge Evo, mientras que las actividades en la pista incluyen prácticas de salida lanzada y adelantamiento. La excelente labor de los instructores se complementa con vídeos y datos obtenidos con la tecnología más avanzada para realizar un análisis detallado de los tiempos de cada vuelta. Es un curso lleno de acción, una de las razones por las que Daniel Wu se siente en él como pez en el agua.
Según el actor, "Correr en Daytona es una experiencia increíble, algo icónico que al principio intimida bastante, particularmente al entrar en el peralte de las curvas rápidas, que es todo un reto. Es tan inclinado que parece que el coche va a caer contra el muro, pero, una vez que has alcanzado la velocidad necesaria, por supuesto, la física evita que eso suceda”.
A Wu nunca le ha asustado la acción, algo que ha demostrado desde los comienzos de su carrera de la mano del gran actor Jackie Chan. Se ganó el aplauso del gran público en la serie de acción y artes marciales “Into The Badlands”, producida entre 2015 y 2019, pero también en la pantalla grande, junto a Alicia Vikander en “Tomb Raider”. En 2021, lo veremos acompañando a Hugh Jackman en “Reminiscence”, escrita y dirigida por Lisa Joy (“Westworld”). Es lógico, por tanto, que se sienta en su elemento mientras se precipita por el difícil trazado de Daytona a 286 km/h en el 488 Challenge Evo, .
"Es como el instrumental de un cirujano, muy preciso y fiable", afirma el actor. “El 488 Challenge Evo —continúa— tiene un control y una carga aerodinámica tan increíbles que, incluso a toda velociad, no sientes ningún miedo. Literalmente te fundes con el coche y formas un todo con él. Suena cursi, pero es lo que ocurre”.
Wu ya conocía Ferrari y el circuito, pero no había experimentado nunca la emoción que solo un Challenge puede ofrecer. "La forma en que Corso Pilota te lleva lentamente del F8 Tributo al 488 Challenge Evo, reforzando toda tu experiencia previa antes de pasar al coche de carreras, es un proceso perfecto", señala Wu, que prosigue diciendo: “Una vez que has probado la emoción de conducir el Challenge Evo, es difícil imaginar volver a salir a la pista con un coche de carretera, es algo incomparable”.
Casualmente, Wu y su socio adquirieron recientemente un 365 GTB/4 “Daytona” de 1972, llamado así precisamente por el circuito. “El Daytona es realmente precioso; tiene todos esos detalles románticos que lo convierten en un Ferrari, desde el motor de 12 cilindros hasta la palanca de cambios manual. Y encima es convertible. Y a pesar de sus años, se conduce como un coche nuevo”.
Nada más decir esto, se pone el casco, conversa brevemente con su instructor y, tras subirse al 488 Challenge Evo, se dirige una vez más a la imponente pista de Daytona.