El sueño continúa

Tatsuya Otani

El equipo japonés Car Guy ganó la serie asiática de Le Mans en su primer intento y este año ya lidera la clasificación. Aquí descubrimos la sorprendente historia del propietario del equipo, Takeshi Kimura

Takeshi Kimura, empresario afincado en Tokio y propietario del equipo de competición Car Guy, participó por primera vez en la Asian Le Mans Series por algo que él describe como un capricho. Después de ganar su primera carrera, ya no volvió la vista atrás y ganó las cuatro pruebas de la serie. Tan solo cuatro meses más tarde, participó en las legendarias 24 Horas de Le Mans y llegó en quinta posición. Fue una especie de cuento de hadas que empezó en octubre de 2018, en Monza, Italia. Como propietario de un Ferrari 488 Challenge, Ferrari había invitado a Kimura a probar el 488 GT3. “La estabilidad del coche era sencillamente maravillosa”, recuerda el empresario japonés. “Su forma de agarrarse al asfalto recordaba a un escarabajo de agua nadando en un estanque”.

Al final de la jornada de pruebas, Kimura se quedó por allí deambulando, no quería que terminase ese momento tan especial. En la zona de recepción, vio un anuario de Ferrari en una mesa. Cuando lo hojeaba, encontró un artículo sobre las 24 Horas de Le Mans. Y quedó cautivado. Así que se puso en contacto con Ferrari para hacerles una propuesta: estaba dispuesto a adquirir el 488 GT3 si podía participar en la serie asiática de Le Mans. Al principio, el equipo de Ferrari pensó que no había suficiente tiempo para prepararlo, pero, después de meditarlo bien, aceptaron el desafío.

Por tanto, compró el 488 GT3 y participó en la serie Le Mans de Asia con el apoyo de todo el equipo AF Corse.El compañero de equipo y asesor de Kimura, el italojaponés Kei Cozzolino, explica: “Normalmente tú compras un coche, lo pruebas, lo pones a punto y luego participas en la carrera. Pero AF Corse consiguió tener todo perfectamente listo desde el principio. Solo tuvimos que conducir de forma normal, sin cometer errores, y los resultados llegaron de forma natural”.

Aun así, conseguir el título al primer intento parecía una especie de milagro.  Después de aquello, Kimura y Cozzolino hicieron los preparativos para el Circuito de la Sarthe, sede de las 24 Horas de Le Mans. Hubo algunos cambios. A diferencia del GT3, el GTE spec 488 no tiene ABS, así que las ruedas pueden bloquearse si los frenos no se manejan con suficiente delicadeza. A pesar de todo, Kimura pudo prepararse durante cinco días de pruebas en Monza.

El trazado del circuito de Le Mans prácticamente no tiene zonas de escape y la pista posee una forma característica que se eleva en la parte central. A esto había que sumar la presencia de coches de la categoría LMP1 que podían acercarse rápidamente desde atrás en las rectas, con lo que Kimura se vio rodeado de dificultades que no había tenido que afrontar en otras carreras. Y, por si esto fuera poco, cayó enfermo con bronquitis. A pesar de todo, Kimura, Cozzolino y el tercer piloto, Côme Ledogar, consiguieron conducir durante 24 horas a un ritmo constante y sin errores, y finalizaron quintos en la clase GT Am, solo a dos vueltas de los vencedores. Kimura insiste: “Si hubiera estado en mejores condiciones y un poco más acostumbrado al circuito… habría sido posible la victoria”.

Ahora que ha corrido las 24 Horas de Le Mans, ¿cuál es su siguiente objetivo? “Me gustaría competir en el Campeonato Mundial de Resistencia. Por supuesto, tengo que dirigir una empresa, así que no será fácil, pero es un sueño que espero cumplir algún día”. La primera etapa de la serie Le Mans de Asia de esta temporada se celebró en Shanghái el pasado noviembre con un resultado decepcionante. Pero, con su habitual tenacidad, el equipo Car Guy lo compensó en la segunda carrera de la serie, celebrada en enero en Australia, donde dominaron la clase GT en The Bend Motorsport Park y se adjudicaron una victoria muy disputada. En estos momentos, Car Guy lidera la clasificación. El sueño continúa.