PASADO PERFECTO

Keith Bluemel

Muchos propietarios de coches clásicos del Cavallino Rampante no admiten otra cosa que no sea la perfección. Para ellos, Ferrari Classiche tiene un programa de refabricación que garantiza que las piezas de recambio, o incluso el motor completo, se reconstruirán siguiendo las especificaciones originales

Normalmente se otorga un gran valor al hecho de que un coche utilice componentes originales. Los vehículos que poseen el motor y las piezas de transmisión montados inicialmente en la fábrica suelen alcanzar un precio de mercado superior al de aquellos que no los tienen. Pueden ser las piezas correctas, pero si no son las que se instalaron originalmente en ese coche, su valor puede verse afectado.

Por otra parte, ninguna pieza está más sujeta a desgaste que los componentes mecánicos, a los que el tiempo y el uso pasan factura. Por ello, por mucho que disfruten conduciendo, es posible que los propietarios de vehículos particularmente valiosos no quieran arriesgarse a usarlos por temor a romper alguna pieza y destruir así sus datos de procedencia.

Además, a quien adquiere un Ferrari clásico pueden surgirle ciertas dudas. ¿Le habrán montado componentes no originales en algún momento? ¿Han podido utilizar piezas no originales para la restauración del motor o el chasis? Todos estos factores pueden repercutir en el valor del automóvil.

Afortunadamente, la división Ferrari Classiche tiene una solución para este problema. Desde su inauguración en 2006, un programa de refabricación de piezas constituye una parte importante de sus funciones. Su misión es proporcionar a los propietarios de clásicos valiosos de la marca la tranquilidad de que, en caso de que falle algún componente de su preciada joya, existe la posibilidad de obtener un recambio producido por el propio fabricante siguiendo las especificaciones originales .

El departamento cuenta con un vasto archivo de información original que incluye las hojas y planos de construcción de los vehículos, y que pueden usar como punto de partida para reproducir los componentes tal y como eran en origen. También tienen acceso al taller de fundición y máquinas, por lo que muchas piezas se replican en el mismo lugar en el que se fabricaron en el pasado. 

La expresión “especificación original” es importante, ya que significa que todos los componentes suministrados por Ferrari Classiche son exactamente los mismos que se instalaron en el automóvil en el momento de su construcción. Esto asegura que el vehículo conserva su condición de pieza original. Por lo tanto, un cliente puede obtener un motor completo construido de acuerdo con las especificaciones iniciales, lo que le permite almacenar la unidad original y usar el coche sin temor a estropear el certificado de procedencia. Asimismo, si un automóvil ha perdido el motor o la transmisión inicial, se pueden construir y suministrar nuevas unidades que coincidan con el original en cada detalle.

Teniendo esto en cuenta, los automóviles equipados con estos motores o transmisiones refabricados son aptos para recibir la certificación Classiche completa, siempre, claro está, que el resto del automóvil cumpla los criterios especificados. Naturalmente, los expertos de Classiche, con su dedicación habitual, pueden asesorar y resolver cualquier discrepancia que exista con la especificación original.

Por si alguien piensa que Ferrari Classiche solo suministra unidades completas, no es así. En Maranello se han refabricado numerosas piezas individuales, incluidas culatas, bloques motor, camisas de cilindros, cigüeñales, árboles de levas y espárragos, coronas y piñones.

Por lo tanto, aquellos propietarios que tengan ganas, y al mismo tiempo miedo, de sacar su querido clásico a dar una vuelta, pueden estar tranquilos: Ferrari Classiche tiene justo lo que necesitan.