Una superestrella de los circuitos

Chris Rees

Ver el FXX-K Evo correr en las pistas es asombroso, pero ¿qué se siente al conducirlo? Nos lo cuenta uno de sus afortunados propietarios

Para cualquier fan de Ferrari, ver y escuchar los coches del programa XX corriendo a máxima velocidad en un circuito tiene que ser una experiencia excepcional. Y, de entre los vehículos salidos de este programa, uno de los más excepcionales es el FXX-K Evo. El que podría considerarse como el coche más extremo fabricado por Ferrari al margen de la Fórmula 1, esta versión del LaFerrari es, como la marca "Evo" sugiere, una evolución del ya potentísimo FXX-K.

Si es impresionante ver esta asombrosa máquina en acción, ¿cómo será conducirla? Hemos hecho esta pregunta a John Taylor, de Texas, EE.UU. El FXX-K fue uno de los tres primeros coches actualizados a la especificación Evo hace unos dos años. Es obvio que le encanta pilotar este coche; cada vez que un piloto termina de correr en un circuito, recibe un adhesivo para pegarlo en el parabrisas y el de John ya está cubierto por una fila y media de ellos.

“He conducido este coche en versión Evo y en versión normal, así que tengo con qué compararlo”, cuenta John. “Claramente, el Evo posee más carga aerodinámica, te ayuda a frenar más tarde y a coger más velocidad en las curvas. La sensación es que es mucho más estable a velocidades punta”.

John tiene razón al mencionar el 23% de carga aerodinámica extra, que es la principal mejora del Evo. Algunos cambios importantes introducidos en los extremos delantero y trasero, y en los generadores de vórtices situados en los bajos marcan una enorme diferencia.

Por tanto, ¿qué dificultades se encuentra uno al pilotarlo? “La verdad es que es un coche extraordinariamente fácil de conducir”, afirma John. “Para mí, este es el aspecto más impresionante. Llevé un 458 Challenge durante varios años y pensé que era fácil de conducir, pero el FXX-K Evo es aún más fácil. No necesité mucho entrenamiento para este modelo, pero recibí una buena orientación en la fábrica cuando me lo entregaron”.

También ha contado con la ayuda de Marc Gené, expiloto de F1 y actual piloto de pruebas de Ferrari, al que conoce desde hace años. “Siempre que está cerca, doy un par de vueltas con él. Es indescriptible, hay que vivirlo. Hice Spa en seco y mojado con él, ¡fue espectacular! Esos recuerdos me acompañarán para siempre”.

El FXX-K Evo va provisto de un motor V12 de 6,3 litros que, combinado con la energía eléctrica generada por el sistema híbrido del KERS, produce 1050 CV, así que es una máquina tremendamente rápida. Pero, ¿cómo de rápida? John lo explica: “Con el KERS y el V12 juntos, es un coche increíblemente rápido, alcanza una velocidad punta extremadamente alta en las rectas de la mayoría de los circuitos”.

Luego continúa: “El sistema híbrido es asombroso. Con el Evo, han añadido un botón para activar el KERS cuando está en modo Long Run. Y realmente puedes sentir ese pico extra de potencia”.

Para aquellos a los que sorprenda esa llamativa combinación de colores negro y amarillo, diremos que es obra de Flavio Manzoni, jefe de diseño de Ferrari, a quien John acudió para crear el diseño de la pintura. Al saber que John había comprado un LeFerrari amarillo y que también le gustaba el negro, a Manzoni se le ocurrió esta original combinación de tonos.