El Ferrari Superamerica combina las impresionantes prestaciones de la berlinetta Ferrari de 12 cilindros con la originalidad de un versátil descapotable. El Superamerica es también el primer coche de producción que adopta un innovador techo rotatorio con una tecnología electrocromática desarrollada exclusivamente para grandes superficies de cristal, un elemento que transforma el coche de un coupé a un descapotable en pocos segundos.
El inconfundible y exclusivo Superamerica diseñado por Pininfarina recupera ese nombre, después de que lo llevaran algunas ediciones limitadas muy famosas de modelos de 12 cilindros construidos por Ferrari entre 1956 y 1961. En línea con sus ilustres antepasados, el nuevo Superamerica es también un coche de serie limitada.
Con un estilismo interior y exterior realizado por Pininfarina, el Superamerica mantiene las bellas proporciones típicas de las berlinettas V12 de Ferrari, en las que se integra el exclusivo techo Revocrómico de este modelo. Esa característica innovadora combina a la perfección con las líneas del coche gracias a los dos contrafuertes laterales, una identidad estilística tomada de algunos de los modelos más clásicos de Ferrari. Los contrafuertes también proporcionan protección antivuelco junto con la propia estructura del techo.
Toda la sección posterior del vehículo se caracteriza por un nuevo capó de fibra de carbono, que incorpora el emblema de Ferrari en relieve, y fue diseñada para destacar las curvas musculosas y sensuales del Superamerica. El inusual perfil del techo da al coche una apariencia marcadamente deportiva que está resaltada por las llantas de serie de 19 pulgadas en dos piezas, que a su vez van equipadas con neumáticos Bridgestone Potenza RE050.
El frontal del coche se caracteriza por la nueva apariencia del conjunto de los faros, coloreados en aluminio alrededor, y por la toma de aire sobre el capó del motor.
El Superamerica es tan exclusivo en el interior como en su exterior, con guarnecidos de cuero meticulosamente trabajados a mano y detalles de fibra de carbono para los interruptores del techo, así como para los bordes del sistema de radio y del display de instrumentos. Todo el habitáculo se transforma por completo con la luz que pasa a través del gran techo de cristal, pero esto no afecta al confort abordo ni al espacio
Los asientos del Superamerica están tapizados en un cuero perforado especial, mientras que los espacios para almacenamiento se han mejorado, con diversas guanteras y bolsas especiales detrás de los asientos.
El elemento estilístico y funcional más importante del Ferrari Superamerica es su exclusivo techo rotatorio patentado por Fioravanti, un techo que ha sido denominado Revocrómico para destacar la combinación de su movimiento de rotación hacia atrás y la tecnología electrocromática. El techo RevocrómicoTM va soportado en una estructura hecha completamente de carbono, en la que va integrado el cristal electrocromático, y que se une tanto funcional como estilísticamente con el parabrisas trasero. El techo cuenta con un sencillo e innovador mecanismo de rotación con un punto de apoyo único, y su apertura y cierre se hace de forma muy suave.
Una vez que el enganche del techo ha sido liberado, el Superamerica se convierte de un coupé a un descapotable en menos de 10 segundos. Cuando está abierto, el techo queda replegado y se sitúa al nivel de la tapa del maletero. La mayor evidencia de lo original que es el techo Revocrómico viene dada por el hecho de que el cristal térmico de la ventana trasera funciona como un efectivo deflector de aire cuando la parte superior está plegada. Se han hecho refuerzos estructurales alrededor del mecanismo del techo y, además, los dos contrafuertes laterales especialmente sólidos también actúan como barras antivuelco.
Una innovación técnica más es el diseño integrado del techo y el maletero: el techo abierto queda al nivel de la tapa del maletero, por lo que la capacidad del mismo no se ve afectada, independientemente de ir cubierto o descapotado.
La parte trasera es también suficientemente amplia para permitir que el maletero se pueda abrir sea cual sea la posición del techo.Cuando el techo está bajado, se puede colocar una cubierta especial para protegerlo. Cuando el techo va cerrado, esta cubierta se pliega y se guarda en un compartimento dentro del maletero.
La tecnología electro-cromática se utiliza en el habitáculo por primera vez en el mundo en la industria del automóvil. El techo de cristal es aproximadamente de un metro cuadrado de tamaño (1.130 mm de ancho y 840 mm de largo) e inunda el interior con luz natural, incluso cuando está cerrado. Sin embargo, también ofrece la ventaja añadida de permitir a los ocupantes ajustar el tintado de ese cristal según sus preferencias.
De hecho, el cristal electrocromático, fabricado en colaboración con Saint Gobain, es laminado y la superficie interna de una de dichas láminas lleva un revestimiento múltiple con una película electrocromática. Cuando una carga eléctrica de bajo voltaje pasa a través de él, se activa la capa electrocromática que cambia los niveles de tintado. En el caso del techo RevocromicoTM, esto se consigue utilizando el conmutador de cinco posiciones situado en la consola central.
En la configuración más luminosa, la cantidad de luz que entra en el habitáculo es la misma que con un techo solar de cristal convencional, mientras que en la más oscura sólo se filtran un 1% de los rayos solares. El cristal tarda sólo 60 segundos en pasar de la configuración más oscura a la más luminosa. Sin embargo, cuando paramos el motor el cristal adopta automáticamente la configuración más oscura para proteger el interior. En términos de seguridad, mantenimiento y limpieza, el techo de cristal y su estructura son muy similares a uno normal.
El motor del Superamerica está basado en el más clásico de todos los esquemas de Ferrari, el V12. Tiene una arquitectura en V a 65º, con doble árbol de levas en cabeza por cada bancada de cilindros y cuatro válvulas por cilindro. El cárter y las culatas son de aleación de aluminio. En la más pura tradición Ferrari, el V12 también adopta un sistema de lubricación por cárter seco.
El motor del Superamerica ha sido potenciado hasta los 540 CV a 7.250 rpm (25 CV más que el 575M Maranello). Esta potencia extra se consigue gracias a unas características específicas de ingeniería:
- El uso de nuevos colectores de admisión de mayor flujo
- Un coeficiente de caudal mejorado gracias a la optimización de las características dinámicas de fluidos de los conductos de entrada del cilindro y de los colectores de admisión
- El nuevo diseño del sistema de escape que reduce la presión de retorno.
De la gestión electrónica del motor se ocupa una CPU Bosch Motronic ME7 individual para cada bancada de cilindros, que controla la inyección múltiple PFI, la válvula del acelerador movida por cable y unas bobinas individuales por cada bujía. Hay cuatro sensores situados en el cárter para prevenir el golpeteo.
El Superamerica tiene una configuración transaxle, con una caja de cambios de seis velocidades de sincronizadores multicono.
El diferencial autoblocante está calibrado específicamente (25% en tracción, 45% en retención), con la intención de optimizar la tracción y la estabilidad en todas las condiciones.
En relación a la caja de cambios estilo F1, la incorporación de electrónica de última generación no sólo hace que los cambios sean más rápidos (menos de 180 milisegundos), sino que también son más suaves en el modo automático F1 A.
El chasis del Ferrari Superamerica está basado en el del 575M Maranello, con refuerzos estructurales adicionales que garantizan el compromiso perfecto entre las prestaciones de un Ferrari y la elegancia estilística de un descapotable. La incorporación del techo de cristal rotatorio exigía fortalecer los marcos laterales, reforzar los tubos del chasis alrededor del túnel central y de forma muy especial los pilares A. Los contrafuertes traseros que se añaden a los refuerzos estructurales se colocan alrededor del mecanismo del techo, mientras que el cortafuegos posterior se fortalece y se ponen otros refuerzos adicionales alrededor del área transaxle.
El agarre del Ferrari Superamerica ha sido mejorado con la incorporación de una suspensión activa que utiliza seis acelerómetros y amortiguadores de dureza variable a través de una válvula. El sistema “lee” la superficie de la carretera y adapta la amortiguación de forma casi instantánea.
El conductor puede elegir entre dos configuraciones:
- Sport: con un calibrado deportivo para una conducción de altas prestaciones.
- COMFORT: con un calibrado que absorbe los baches de las superficies irregulares, indicado especialmente para la conducción en ciudad y para largos viajes por autopista.
En línea con la filosofía innovadora de Ferrari, estas configuraciones no sólo actúan sobre la amortiguación, sino también sobre el control de tracción y la lógica de funcionamiento de la caja de cambios F1.
El Superamerica puede incorporar el paquete GTC Handling que incluye:
- Una puesta a punto más deportiva a través de, por un lado, unos muelles que son un 35% más rígidos delante y un 15% detrás y, por otro, gracias a una barra estabilizadora trasera endurecida un 73%;
- Un escape deportivo
- Pinzas de freno rojas con el logo Ferrari;
- Discos de freno CCM (Carbón Composite Material), de 398 mm delante y de 360 mm detrás
Estos últimos, derivados directamente de la experiencia de Ferrari en los circuitos de Fórmula 1, están desarrollados en colaboración con Brembo para garantizar cortas distancias de frenado, incluso después de un uso exigente.