El Circuito de Monza, situado cerca de la ciudad de Monza, al norte de Milán, mide 5.793 km (3.600 millas) y se extiende por el tranquilo parque de la Villa Real de Monza.
Conocido como «El Templo de la Velocidad», este circuito histórico es una meta venerada del motorsport desde que se inauguró en 1922. Es el trazado más antiguo de Europa continental.
El diseño del circuito de Monza se caracteriza por sus largas rectas y curvas de alta velocidad, que ofrecen unas sensaciones espectaculares al volante. En 2005, Kimi Räikkönen batió el récord de máxima velocidad en Fórmula 1 precisamente aquí, corriendo a 370,1 km/h y dando muestras de la historia y la emoción sin igual que brinda este circuito.
A partir de las 07.30 Acreditación y entrega del equipo
08.30 - 09.00 Briefing para el piloto
09.00 - 09.20 Vueltas de reconocimiento del piloto
09.30 - 12.30 Primera sesión de pilotaje
13.00 - 14.00 Almuerzo
14.00 - 14.15 Foto de grupo
14.30 - 17.30 Segunda sesión de pilotaje
17.30 - 19.00 Aperitivo de clausura y ceremonia de entrega de premios
Todos los horarios del evento están sujetos a cambios
El autódromo lombardo, inmerso en un hermoso parque, es el último ejemplo que queda de un tipo de circuito que de otra manera habría desaparecido de la escena automovilística internacional.
A pesar de los numerosos cambios en su diseño, Monza siempre ha mantenido su carácter distintivo. La pista cuenta con tres rectas de alta velocidad "divididas" por chicanes muy técnicas. Estos puntos, junto con las temibles curvas de Lesbo y Parabolica, requieren un buen agarre mecánico para no perder un tiempo valioso. La primera chicane ofrece una excelente oportunidad para adelantar ya que los vehículos tienen que frenar muy violentamente al acercarse. La chicane Roggia también es un buen lugar para los adelantamientos, especialmente si los conductores pueden aprovechar al máximo la Curva Grande.