Richard Aucock
Ferrari ha mejorado el sistema FDE del F8 Tributo. Aquí explicamos por qué las mejoras aumentan la diversión al volante de este impresionante deportivo V8
El F8 Tributo es la última evolución del deportivo V8 de Ferrari. Pertenece a una estirpe cuyos orígenes se remontan a 1975 con el 308 GTB, el primer biplaza con motor V8 central salido de la factoría del Cavallino Rampante. Esta última versión recoge el rico legado de sus antepasados y, como es habitual, la mejora. Y, aunque el F8 Tributo es un homenaje al archipremiado motor V8 de Ferrari, la dinámica del chasis es otra área en la que los ingenieros de Maranello han abierto camino a la innovación.
En 2013 se introdujo la primera generación de la tecnología SSC (Side Slip Angle Control) en el 458 Speciale. Se trata de un sistema de control de la dinámica que funciona con el diferencial electrónico E-Diff y el control de tracción F1-Trac para equilibrar a la perfección la agilidad y estabilidad del vehículo. Con él, sentir el placer de hacer derrapar un Ferrari ahora es más fácil. Y, al igual que el motor V8, esta tecnología no ha dejado de evolucionar desde que nació.
En el 488 GTB (2015), se integraron en el sistema los amortiguadores magnetorreológicos adaptativos SCM. El desarrollo continuó y, en 2018, el Ferrari 488 Pista introdujo la sexta generación del sistema Side Slip Angle Control, el SSC6, que incorporaba una auténtica primicia tecnológica a nivel mundial: el sistema Ferrari Driving Enhancer, o FDE. Para el F8 Tributo de 2019, esta tecnología siguió perfeccionándose y dio lugar a la versión SSC6.1, que incluye el sistema FDE+. Nos hemos sentado a charlar con el ingeniero Stefano Varisco para que nos explique qué mejoras ofrece esta versión a los afortunados conductores del F8 Tributo.
FDE funciona aplicando la presión de los frenos de forma independiente a cada pinza al tomar las curvas. Según Varisco, “cuando se conduce al límite, facilita el control del coche en situaciones de sobreviraje”. Esta tecnología solo se activa en las curvas, nunca al frenar. En el 488 Pista, la función FDE solo estaba disponible en el modo CT-OFF del manettino, con el que se desactivaba el control de tracción. Varisco describe este modo como el “momento de disfrutar” para los pilotos con más experiencia. En el F8 Tributo, la versión FDE+ también puede utilizarse con el modo RACE, que ofrece a los conductores la seguridad extra de la estabilidad electrónica, aunque solo en situaciones extremas.
“El modo CT-OFF proporciona máximo sobreviraje y máxima emoción. En cambio, RACE ofrece mejor rendimiento y vueltas más rápidas. El coche no patina y ayuda a los pilotos a conseguir los mejores tiempos de forma más constante en los circuitos”. Las mejoras del sistema FDE+, afirma Varisco, permiten utilizar antes el acelerador en las curvas y aplicar más aceleración. Al empezar a acelerar antes, el F8 Tributo es más rápido contra el reloj.
Dado que interviene antes en la curva, FDE+ se vuelve más suave y lineal, lo que proporciona más confianza al piloto, que no necesita aprovechar los "picos" de energía de la frenada para volver a encarrilar el vehículo; en conjunto, el sistema es más tranquilo y natural, y las fuerzas correctoras muy inferiores. Varisco señala que este es el resultado del incansable trabajo de desarrollo realizado por Ferrari. Perfeccionarlo ha llevado años, porque el objetivo era conseguir que el piloto sintiese la épica de conducir al límite sin que resultase obvio que el vehículo estaba prestándole ayuda electrónica.
El sistema FDE+, que forma parte de las mejoras introducidas en el sistema SSC6.1, aumenta el placer de pilotar el F8 Tributo en un circuito. Extenderlo del modo CT-OFF al modo RACE permite a más conductores experimentar las emociones que transmite. Y el mejor cumplido que puedes hacer a Stefano Varisco es decirle no te has dado cuenta de que el producto de todo ese esfuerzo se ha activado…