En las recientes Finali Mundiali de Mugello, se celebró el 18.º aniversario del innovador programa XX de Ferrari, que combina coches extraordinarios y experiencias excepcionales de los clientes
Se trata de un momento de auténtica picardía. Unos cuantos coches más adelante están Michael Schumacher y Rubens Barrichello en sendos coches F2005 de Fórmula 1. ¿En cuántas ocasiones se encuentra uno con un dúo semejante en la misma calzada?
El hombre que espera al final de los boxes de Mugello nos hace señas para que entremos, pero una mirada al habitáculo del FXX y el gesto de «adelante» que hago con la mano son suficientes para animar al piloto de pruebas Luca Badoer a continuar. Creemos que la multitud apiñada en las gradas no pondrá objeciones a otra vuelta más…
Celebre los 18 años del Programa XX mientras se combinan autos extraordinarios con experiencias excepcionales para los mejores clientes
El programa XX de Ferrari tomó a todos por sorpresa durante su lanzamiento en las Finali Mundiali de Mugello de 2005. Continúa hasta el día de hoy y sigue siendo tan innovador como siempre. El FXX original se basó en el Enzo y conserva un lugar sagrado en la tradición de Ferrari: solo se fabricaron 29 y el trigésimo ejemplar se regaló a Schumacher.
Nunca homologado oficialmente para uso en carretera ni destinado a la competición, Ferrari utilizó el coche para un programa privado de «Track Days» al que invitó a participar a sus principales clientes. Almacenaría y mantendría los coches, además de encargarse de la logística. Ahora se escribe mucho sobre el lujo «experimental», pero Ferrari ya iba muy por delante entonces.
Basado en el LaFerrari, el FXX K llegó en 2015 como el Cavallino Rampante de producción limitada y de alto rendimiento definitivo (solo se fabricaron 42)
Aquel primer FXX tenía más potencia (788 CV), aerodinámica activa para mayor carga vertical y una caja de cambios revisada inspirada en la Fórmula 1. Pero la propuesta única de venta incluía que aquellos 29 propietarios seleccionados se convirtieran en parte genuina del equipo de desarrollo de Ferrari. Aprender a sacar lo mejor de una máquina tan extrema como esta en Spa o Nürburgring debió de causar gran sensación, pero también saber que el coche era un laboratorio sobre ruedas.
Tras un FXX Evo aún más potente y la introducción del 599XX de 2010 (y el posterior Evo), el programa ha intensificado la participación del cliente y ha dado lugar a profundos avances técnicos. Algunos ejemplos: en el maletero del 599XX hay un par de ventiladores que extraen aire del difusor hacia el paso de rueda trasero y se combinan con otras innovaciones para maximizar la carga aerodinámica sin añadir resistencia al avance.
El programa XX tomó al mundo por sorpresa cuando llegó a las Finali Mondiali en 2005. Desde entonces, ha seguido estableciendo el estándar para la innovación en los autos de pista
La nueva configuración del manettino ofrece al conductor nueve parámetros diferentes de control de tracción y un dominio exhaustivo de los amortiguadores magnetorreológicos de la suspensión. Gran parte de esta tecnología se ha introducido más tarde en los coches de carretera de la Casa de Maranello y explica en cierta medida por qué los Ferraris contemporáneos combinan características de conducción tan flexibles con respuestas de manejo igualmente sublimes y estables.
Quizá el más conocido de todos los automóviles XX sea el FXX K, que llegó en 2015 y estaba basado en el LaFerrari. Si los coches XX anteriores parecían modelos en desarrollo, la aportación del Centro Stile al FXX K ejemplificó la relación entre estética y aerodinámica para crear un automóvil con una personalidad efectista propia, incluidas las alas traseras acortadas.
«Todo el mundo piensa que, para ser funcional, un vehículo de pista tiene que ser brutal, pero nadie cree realmente que un automóvil así pueda ser hermoso», me comentó Flavio Manzoni, jefe de diseño, durante la presentación del coche. «La aerodinámica supone una gran oportunidad para los diseñadores. Es imposible concebir un coche moderno como este sin entender los principios de la ingeniería».
El Ferrari FXX-K EVO . La K significa Kinetic, una parte integral del sistema de recuperación de energía cinética de 1.050 CV alojado en la berlinetta de dos puertas
El FXX K ganaría en 2016 el premio Compasso d'Oro al diseño y los jueces destacaron su «alto nivel de artesanía industrial». Es un galardón prestigioso para un coche que podía completar una vuelta en Fiorano cinco segundos más rápido que el LaFerrari, con la ayuda de Pirellis hechos a medida y una potencia total de 1050 CV. Los ajustes de conducción incluían «clasificación», «carrera larga», «impulso manual» y «carga rápida», aprovechando el motor V12 ICE y los sistemas híbridos, mientras que otro manettino de cinco posiciones regía el E-DIFF, el control de tracción y el Side Slip Control.
Sorprendentemente, el Evo de 2017 mejoró la aerodinámica para conseguir aún más carga vertical…