Aquí no hay distinciones entre las diferentes áreas, departamentos y puestos: todos formamos parte de esta gran empresa, que el año que viene celebra su 75 aniversario.
Por eso hemos decidido cambiar un poco las cosas con las fotografías del Anuario 2021. Seleccionamos una serie de lugares en toda la empresa y pedimos a nuestros colegas que posaran para nosotros en zonas en las que no trabajan necesariamente a diario.
Así, hay ingenieros en el taller de pintura con los reconocibles monos rojos de seguridad, personal de ventas entre los maravillosos V8 en la línea de montaje de motores, abogados reunidos frente al Centro de Desarrollo de Productos, personas que suelen estar en la pista fotografiadas esta vez en interiores, en el área de mecanizado, etc.
En el Centro Logístico GES, de izquierda a derecha: Luca Pasqualini, Florian Brice Aletti, Giulia Vicentini, Luca Pedrini, Miguel Angel Giovingo, Paula Mudaca, Enes Tas
No son operarios o ejecutivos, mujeres u hombres, ni de diferentes nacionalidades.
Solo gente.
Porque Ferrari es un gran equipo.
Este es un tema especialmente importante para nuestro CEO, Benedetto Vigna, que se incorporó al equipo en septiembre. Para este reportaje se reunió con sus colegas en lo que muchos consideran el corazón de Ferrari: la estación 19 de la línea de montaje de los motores de 8 cilindros. Se la conoce como «la estación del matrimonio», porque aquí es donde se coloca el motor en el chasis.
«Llegué a Maranello tras 26 años en una empresa de alta tecnología», cuenta Vigna. «A lo largo de toda mi carrera profesional, he escuchado una y otra vez la palabra "pasión" sobre los más diversos entornos de trabajo.
En la entrada de las líneas de montaje; La azotea de la línea de montaje V12; En el taller de pintura; Fuera del Centro Logístico GES; En el Departamento de Mecanizado Mecánico
Y es cierto: hay muchos lugares en los que la gente trabaja apasionadamente, sin descanso, creyendo por completo en lo que hace. Sin embargo, no creo que la pasión de la gente que trabaja en Ferrari tenga parangón en ningún lugar del mundo.
Eso fue lo que más me llamó la atención cuando llegué. Es una pasión aún más profunda y sentida que une a todos en todos los niveles. La gente aquí está realmente enamorada de la marca, se percibe un sentido de pertenencia muy especial. Esto es lo que nos permite luchar constantemente y con éxito por la innovación y la perfección.
Con la motivación adecuada, todo el mundo tiene el potencial de volverse más curioso y atento, incansable en la búsqueda de la excelencia».
Montaje de todos motores, de izquierda a derecha: Veronica Verruso, Davide Torre, Virginia Ercolanese, Francesco Spina, Stefania Valeria Rinaldi, Roberto Schiavello
Al propio Enzo Ferrari le gustaba subrayar que, además de las paredes y las máquinas, su empresa estaba formada sobre todo por personas. Con el paso del tiempo, este concepto se ha puesto en práctica con iniciativas que ya forman parte de la tradición de Ferrari: desde abrir las puertas a las familias de los empleados para «Natale Bimbi» en Navidad, pasando por las visitas del programa «Formula Benessere» y las revisiones médicas anuales en colaboración con Med-Ex, hasta nuestro interés por la sostenibilidad y la certificación de igualdad salarial de este año. Sin olvidar, por supuesto, la inversión que realizamos en el desarrollo profesional continuo de nuestros empleados a través de la Scuola dei Mestieri y un Executive MBA con la Bologna Business School.
Todo ello ha contribuido a convertir Ferrari en algo más que un equipo.
«Hasta el concepto de “familia" corre el riesgo de utilizarse en exceso», continúa Vigna. «Pero, una vez más, no creo que sea ninguna exageración hablar así de Ferrari. Y no me refiero solo a nuestros empleados. Lo comprobé de primera mano cuando fui a Taormina para el 10.º aniversario de la Cavalcade este septiembre. He sido testigo de cómo nuestros clientes se sienten parte de la gran familia Ferrari, y con razón.
No debemos olvidar nunca que, más allá de nuestras capacidades individuales, somos ante todo parte de una enorme red, no solo aquí en la empresa, sino también en lo que respecta a toda la gente de todo el mundo que nos quiere y nos apoya: nuestros clientes, nuestros aficionados y los amantes de todo tipo del Cavallino Rampante. Un universo que nunca debe dejar de expandirse».